SONORAMA RIBERA 20. JUEVES. FELIZ CUMPLEAÑOS

  

Aranda de Duero, 10 de agosto de 2017

Y comienza lo que de verdad es el Sonorama Ribera del 20 aniversario, con su Plaza del Trigo y ese mañaneo y el tardeo que hace de Aranda una ciudad con música por todas partes. Pinta bien esta edición que por primera vez a agotado todo el papel en venta. Los festivales tienen que crecer aunque quizás el Sonorama a alcanzado el tope de su aforo y hacerlo más grande pueda ser malo para un festival que puede perder ese encanto que ha tenido durante estos 20 años de andadura.

Por la mañana había que levantarse pronto para poder disfrutar de todo lo que el festival ofrece gratis en los barrios de Aranda, así que nos dirigimos pensando en escuchar buena música y llegamos a por una copa de Ribera en una mano y un cachis de croquetas en la otra.

Morgan fueron los encargados de abrir el Escenario Radio 3 de la Plaza del Trigo. Lo tienen todo para ser unos triunfadores en esto de la música, Pablo López  a la guitarra, Ekain Elorza, un grande, a la batería y sobre todo a Carolina de Juan a la voz. Y es que no sólo Quique González sabía lo que hacía cuando la invitó el año pasado a su gira, cantando de manera impecable “Charo”, nosotros ya sabíamos que Nina vale mucho. Han venido a presentar su primer disco “North” (Goodbye Producciones, 2016) y han dado un auténtico bolazo. Poco pudimos disfrutar ya que nos dirigimos a la rueda de prensa que presentaba el Festival con Amaral como plato fuerte. Eva y Juan nos mostraron su cariño por un Festival que les ha marcado en su vida y desearon que Sonorama, por lo menos, cumpla otros veinte años.

Nos acercamos a la Plaza de la Sal donde comenzaba el concierto de Supertennis en el Escenario Heineken. Los de Alburquerque son frescos y potentes. Y se merecen un hueco en este mundo independiente. Su primer trabajo es una auténtica maravilla y así lo demostraron en el pequeño espacio que tuvieron. Allí nos quedamos para ver a Canard, banda con sólo un año de vida y que con la producción de Emanuel Pérez “Gato”, bajista de Izal, presentan el primer largo grabado en la propia Aranda de Duero. El propio “Gato” toca el bajo también en Canard y demostraron que, a pesar de los problemas de micro que tuvieron al principio, pueden ir consiguiendo hitos en su carrera que de momento es corta.

La espera se hacía larga para las ya anunciadas sorpresas de la Plaza del Trigo. El donostiarra Mikel Erentxun voló hacia el renombrado Escenario Radio 3 con un publico entregado. La segunda sorpresa de la mañana eran Arizona Baby, que dieron en auténtico bolazo con el Meister al bajo y el Sr. Marron repartiendo guitarrazos a diestro y siniestro hasta ensordecer a la plaza y a parte de la calle principal de Aranda que no estaba tan llena como se podía esperar y es que no podemos olvidar que Arizona Baby no es una banda que despierte muchas pasiones entre las teenagers indies que afloran por el Trigo. Sonaron temas suyos y versiones como “Lithium” de Nirvana, que sonó espectacular.

Y no todo son bandas en el Sonorama y en muchas plazas lo que hay son Dj’s amenizando las mañanas y las tardes en Aranda. Nos dirigimos a la Plaza del Rollo para poder disfrutar de la sesión de Say Yes Dj. El residente de la Maravillas de Madrid nos deleita con una mezclas de ensueño en una plaza a reventar.

Es hora de retirarse a nuestros aposentos para pintarse la raya del ojo. Lo del recinto es demasiado duro y hay que planchar la oreja para prepararse. Nos hubiera gustado llegar a Polock pero a las siete de la tarde las colas para entrar al recinto eran infernales y llegamos con muchos problemas a ver al Asturianu Nacho Vegas. Lo que pasó ayer en la entrada es imperdonable en un festival de estas dimensiones y nosotros parece que tuvimos suerte y sólo esperamos treinta minutos de nada. Pero hubo mucha gente que estuvo esperando para entrar mas de hora y media, y eso al final duele y mucho. En todo hay que mejorar, y no se puede perder lo bueno que tenías antes. Seguro que hoy se pone remedio a esa situación y también tenemos claro que el año que viene en el primer día no volverá a pasar lo mismo.

Nacho Vegas saltó al Escenario Ribera del Duero cuando el sol iba bajando en caída libre. El asturiano no defrauda nunca, y además ahora cuenta con una banda de prestigio. Que siempre la ha tenido pero ahora que son los León Benavente, se les aprecia más. Que dura es la farándula. Nacho es siempre reivindicativo y con sus tiempos y sus melodías te va convenciendo poco a poco de que esa es su música y te gusta y te gusta.

Uno de los platos fuertes del día era el concierto 20 años de Sonorama y no defraudó nada. Incluso fue mejor de lo que podríamos esperar. El gran Charlie Bautista acompañado por una banda de auténtico lujo puso música a toda la legión de artistas que fueron pasando por el escenario para cantar sus temas o los de otros y siempre con el recuerdo de todo ese tiempo en el que el Sonorama a sido mágico. Desde el 98 hasta esta edición. La cosa empezó con Sean Frutos de Second y su “Rincón Exquisito” para pasar a un Mikel Izal que se paseaba por la mañana viendo a sus amigos de Canard y que por la noche, como no podía ser de otra manera, nos acompañaba junto a su “Mujer de Verde”. Gabriel de la Rosa de Shinova interpretó con su maestría el Emborracharme de los Lori Meyers que en poco tiempo volveremos a escuchar en el mismo escenario. La Habitación Roja con Jorge Martí y Pau Roca hicieron las maravillas del público con “Ayer”. En esos momentos la gente comenzaba a estar expectante por que vendría en el resto del concierto, porque el listón ya estaba alto. Nuestro abogado favorito, Juan Alberto, nos trajo su Errante de Granada a Aranda. También sonaron Vetusta Morla en instrumental, un recuerdo a los chicos de Supersubmarina y un tema de Love of Lesbian con la voz del propio Charlie Bautista. En Aranda no hay playa pero Mikel Erentxun viajó en cien gaviotas con los coros de todos los que allí estaban. El Lichis llenó el escenario de “Felicidad”. Después de eso apareció Dorian para llevarnos “A Cualquier Otra Parte” con Ivan Ferrerio a la voz. Pudimos comprobar que Enric Montefusco no mueve muchas masas a pesar de interpretar “Adelante Bonaparte” el gran hit de Standstill. Quizás demasiado para muchos de los oídos que allí se congregaban. Para continuar no se podía contar con nadie mejor y Deu de WAS y Kuve nos trajeron a El Columpio Asesino y su Toro, un himno total. León Benavente apareció en pleno para que se hundiera el Escenario Ribera del Duero tocando “Ser Brigada”. La mecha estaba encendida y explotó con los hermanos Ferreiro cantando “Turnedó” y la aparición estelar de Xoel López para cantar su parte de canción. La magia se produce de manera instantánea cuando estos dos artistazos se juntan y aquí no podía ser menos. Y para terminar uno de los himnos oficiales de la música independiente nacional, Xoel con todos los artistas en el escenario y su “Que No” de su época de Deluxe. El repaso fue total y además entrañable, bonito y con un punto en el que a muchos se nos saltaban las lágrimas entre la euforia de todo lo que sonó y los recuerdos que a ellos asocias. Una vez más sólo se puede decir una cosa. Gracias Sonorama. 

Que podemos decir de lo que supone que LOQUILLO vuelva a cantar en el Sonorama. Pues no mucho. Lo mejor es verlo. El músico de Barcelona estaba pletórico y fueron cayendo junto a su banda todos los grandes éxitos de siempre en la hora y diez minutos que duró su recital, que se nos hizo corto. El Escenario Ribera del Duero estaba lleno hasta reventar y el Loco hace lo que mejor sabe hacer, Rock and Roll como nadie.

Y mientras Dorian reventaba literalmente el Escenario Aranda de Duero con unos problemas técnicos que les impidieron tocar más de tres canciones, nos fuimos a disfrutar de la simpleza en el buen sentido de la palabra de Enric Montefusco. Un musicazo al que le falta reconocimiento y que debería estar en lo más alto de la escena nacional. Presentaba su ultimo trabajo en solitario, más acústico, con violin, tuba y su inseparable guitarra acústica. Conciertazo terminado abajo, entre el público, subidos en sillas y reivindicando el que sea la gente el que arrope al artista formando un ente sólo. Mientras Enric nos divertía entre la gente Los Coronas se preparaban para dar lecciones de Surf y Rock instrumental con Karaoke incluido de algún tema de Marisol y su “paparapás".

Amaral era el concierto central y presentó un auténtico espectáculo visual y musical en el que repasaron todos sus éxitos. No soy muy fan de Amaral pero he de reconocer que suenan bien y dieron un buen concierto aunque dormitaron en algunas fases del mismo.

El cachondeo estaba servido y venía desde el barrio de Pan Bendito. El Langui llegó al escenario desde el autobús y nos obsequió con un bolazo de los que hacen afición. Con la crítica y la épica, iba interactuando con el público, con las manitas al aire. La banda era una auténtica pasada y la puesta en escena muy cuidada con el fuego saliendo por delante del escenario. Si a eso le sumas los dos micros en poder de El Langui de El Rellenito Mackeijan, todo estaba servido en bandeja de plata para que lo disfrutaremos los pocos que ya quedábamos en el recinto del festival. 

Mientras la gran Virginia Diaz pinchaba todos los temazos que se podían pinchar en un plato, que por cierto se rompió a la mitad de la sesión, Dinero nos presentaba su nuevo trabajo. La verdad es que el último disco nos parece flojito, pero lo que no se puede dudar es de su directo arrollador. Eso si, no consigo verles antes de las doce de la noche en ningún festival y tampoco es que sean muy de bailar con sus ritmos electrónicos. La fuerza de Dinero no está en duda y dieron un concierto muy respetable y que les hace pelear por demostrar que no es todo el disco que te obligan a manufacturar. 

Llevábamos una semana preguntando que podíamos esperar de WAS en un escenario como el Aranda de Duero y sobre todo como llegaría su máxima estrella Deu, a esas horas tan intempestivas. Lo que teníamos claro es que en esta ocasión la oscuridad estaba garantizada en el escenario que muchos denominan el B. Y es que ya tuvo sus más y sus menos con la organización del Mad Cool por la verbena que le tenían preparado a WAS en su concierto madrileño. Concierto correcto de los vascos que como siempre hacen bailar a todos los que llegaron a casi las cinco de la mañana antes de ir a dormir. Y es que el viernes se presenta repleto de muchas cosas que ver y disfrutar.