FESTIVAL POETAS DEL ROCK. QUIQUE GONZÁLEZ, IVÁN FERREIRO, LEIVA Y ROBE. VERSOS EN CLAVE DE ROCK
Albacete,1 y 2 de septiembre de 2017
La poesía es música, la música es poesía. Partiendo de esta premisa la productora Territorio Musical creó el festival Poetas del Rock que llegaba en su primera edición a Albacete con cuatro de los mejores letristas y músicos de la escena española: Quique González, Iván Ferreiro y Leiva, para la jornada del viernes, y Robe para la del sábado.
La noche caía plomiza convirtiéndose en el escenario ideal para la buena poesía y con puntualidad británica Quique González acompañado de sus Detectives empezaba a llenar el recinto de la Caseta de los Jardinillos de buena música. Hay que destacar la excelente entrada que presentaba el recinto que progresivamente fue llenándose dejando muy pocos huecos en la pista aunque alguno más en grada.
Había que romper el hielo e ir calentando al personal y nada mejor que el rock and roll clásico de Quique y sus Detectives para hacerlo. El madrileño sabe ganarse al público y sus fieles hicieron de coro para que canciones de su último trabajo “Me mata si me necesitas” como “Sangre en el marcador”, “La Fabrica” y “¿Dónde está el dinero?”, y clásicos como “Kamikazes enamorados” y “Tenia que decírtelo” empezaran a animar la noche.
El sonido Nashville de nuestro Springsteen patrio se ha convertido en uno de los referentes y la voz rasgada de Quique era dulcemente acompañada en estos temas por los coros de Carolina “Morgan”, alcanzando su zenit en el tema “Charo” del último álbum del madrileño. “Orquídeas” también tema nuevo dejaba paso a otros éxitos como “La ciudad del viento”, “Salitre” y “Avería y redención”.
“Dallas Memphis” supone la calma que antecede a la tempestad de “Vidas Cruzadas” que puso en pie al auditorio que esperaba ilusionado la aparición (que nunca llegó) de Iván Ferreiro para repetir la colaboración de su álbum en directo. Pero no hizo falta la aparición del gallego para que disfrutásemos de un gran final a un concierto que nos dejó con ganas de más.
El segundo poeta de la noche era el esperado Iván Ferreiro que presentaba su nuevo álbum “Casa” y con la canción que da nombre a este trabajo iniciaba una actuación que como una montaña rusa nos lleva de canciones más intimistas a ritmos más eléctricos. “Tupolev” también de su nuevo álbum nos dejaba al Iván Ferreiro más genuino con sus movimientos y gestos característicos.
Y como un buen poema romántico la lluvia apareció y que mejor que durante la actuación del vigués que reconocía estar acostumbrado. “Pájaro azul” y “La otra mitad” fueron interpretadas bajo unas finas gotas que no querían perderse el espectáculo.
Era hora de sentarse al piano y darnos una ración de nuevos temas como “Dies Irae” y “El pensamiento circular” con canciones que los seguidores más acérrimos conocen a la perfección: “Extrema pobreza”, “El viaje de Chihiro” y “NYC”.
Y para llegar al clímax que mejor que volver a los “Años 80” y continuar con “El equilibrio es imposible”, dos temas de los más conocidos de su época pirata que interpretadas al piano por el gallego dejaron a los asistentes con ganas de algún éxito más de Los Piratas. El público en ese punto recibió de forma grata “El dormilón” y “Como conocí a vuestra madre” dejando intuir que el concierto llegaba a su fin.
Los primeros versos de “Diecinueve” dejan paso a “Turnedo” que nos trae al Iván Ferreiro más autentico deambulando por el escenario entre los miembros de la banda que perfectamente acompañan al vigués y entre los que destaca el líder de Mucho, Martí Perarnau, al bajo. Gran final para una actuación que nos dejaba melodías, versos y lluvia en una noche que todavía no había terminado.
El tercer mosquetero de la noche, Leiva, hacia llenar la pista con un público de lo más variado y el fondo del escenario con paredes de luces mientras la melodía de “El ultimo incendio” y “La lluvia en los zapatos” abrían la actuación. Y es que su último trabajo, “Monstruos”, fue la base fundamental del concierto acompañado de un par de temas del primer álbum, “Diciembre”, y otros dos del segundo, “Polvora”, y para hacer las delicias del respetable no faltaron temas de Pereza e incluso alguna versión.
Leiva acompañado de su banda y de su hermano Juancho, líder de Sidecars, crearon un clima perfecto de unión entre público y músicos que se reflejo en “Animales”, tema del grupo del que formó parte junto a Rubén Pozo. “Guerra mundial” y “Palomas” dejaron paso a un homenaje a Chuck Berry con “Sixteen” y de nuevo otro tema de Pereza, “Windsor”. Los nuevos singles de su último trabajo “Breaking bad” y “Sincericidio” fueron recibidos como si ya formasen parte de sus hits así como “Miedo” que en sus acordes finales se transformaría en ”Superjunkies”, otra vez recordando a su dueto madrileño, y finalizando con un guiño a “Loser” de Beck.
El momento álgido de la noche y con el que todos los asistentes soñaban surgió en la versión que realizaron de “Crímenes perfectos” del gran Andrés Calamaro los tres poetas de la noche. Quique González e Iván Ferreiro subieron de nuevo al ring para acompañar a Leiva en este clásico que se convirtió en uno de los momentos del festival.
Los éxitos del madrileño se mezclaban con más canciones del nuevo trabajo sin dejar respirar al público, así “Monstruos”, “Electricidad”, “Medicina” y “Terriblemente cruel” dejaban prácticamente cerrado el concierto. Pero Leiva se resistía a dejar el escenario y “Lady Madrid” fue la elegida para finalizar el show siendo de nuevo homenaje a la banda que le dio el éxito, Pereza.
La jornada del sábado nos traía en sesión única (como en los mejores cines) a Robe Iniesta, uno de los grandes poetas urbanos del rock español que así lo demostró. El líder de Extremoduro libera todos sus versos lejos de la banda extremeña aunque sabe rodearse de grandes músicos. Los críticos hablan de pérdida de fuerza pero hay que decir que gana en sentimiento. Tenemos que destacar a David Lerman, al que ataviado con una falda escocesa no se le resistía ningún instrumento, y a Lorenzo González en las segundas voces mimetizándose con las del artista.
Fue un concierto en el que nadie pudo achacar que le faltase alguna de sus canciones ya que Robe interpretó al completo los dos discos que tiene en solitario: “Lo que aletea en nuestras cabezas” y “Destrozares” más algún tema de Extremoduro para agrado de los más puristas.
El show de la gira “Bienvenidos al temporal” se divide en dos partes de una hora más o menos cada una en donde el extremeño mezcla canciones de ambos discos eso si destacando que la primera parte es mas melódica, tranquila y reposada nunca mejor dicho porque el propio artista la interpreta sentado en muchos de los temas.
“El cielo cambio de forma”, “Hoy al mundo renuncio”, “Querré lo prohibido” y “Ruptura leve” más algún recuerdo para las élites políticas se sucedían dejando al público con ganas de más. “Nana cruel”, de su primer trabajo, empezó a despertar al recinto y “Guerrero” y “La canción más triste” anticipaban lo que podía ser la segunda parte. La pausa para coger fuerzas y tomar una cerveza como el propio Robe dijo era necesaria.
La segunda parte del show se iniciaba con la intro de “Extrema y dura” poniendo la miel en los labios de los asistentes para pasar a interpretar “Cartas desde Gaia”. De nuevo la alternancia de temas de sus dos discos fue la tónica general. “De manera urgente”, “Puta humanidad”, “Contra todos”, con un gran sólo de bajo, nos recordaban a ciertos trabajos de Extremoduro. Esta segunda parte se despedía con “Por encima del bien y del mal”.
Y para recordar a su grupo Robe inició el bis con “Si te vas” momento para que afloraran las camisetas que jóvenes y no tan jóvenes vestían del grupo que ha marcado a una generación y que, por lo que vimos, sigue marcando. Y para decir adiós que mejor que “Un suspiro acompasado” canción destacada de su primer álbum en solitario.
Poesía y música con mayúsculas se dieron cita en Albacete en una iniciativa que alabamos y que esperamos se convierta en un referente dentro de nuestra ciudad y del panorama nacional cargado de festivales. Suerte.