LUIS BREA Y EL MIEDO

 

Toledo, 26 de mayo de 2017. Sala Pícaro

Podemos pensar que la noche del viernes en Toledo era de esas calurosas de mayo porque cuando empezó el concierto estábamos todos, grupo y público, un poco aturdidos. De hecho, cuando Luis se presentó, casi susurrando, que iban a empezar, la sala parecía estar desierta.

Así que tiró de oficio y empezó a presentar los temas de “Usted se encuentra aquí” para uso y disfrute de los que atendimos al concierto porque sonaron muy bien; de principio a fin. Prácticamente tocaron el nuevo disco con soberbias interpretaciones de “Discotecas”, “El verano del incendio”, “Mil razones” y “’Baso’ se escribe con ‘v’” de anteriores trabajos. Fue ésta última la que inició la segunda definitiva parte del concierto con Luis solo en el escenario cantando sin micro, ayudado de la guitarra: ese momento memorable del concierto. Esos momentos que pueden ocurrir en el pícaro dadas dos cosas: la sala y el público que suele asistir. El cantante se puede permitir esos saltos al vacío. Por el contrario, hay silencios incómodos cuando una guitarra no acaba de sonar bien o la presentación de alguna canción pues el silencio se apodera de la sala. En esos ratos, Luis amenizó la espera con algún chascarrillo gracioso con el que comprobaba si los que estábamos allí lo estábamos para juzgar o para disfrutar.

No creo que quedara ninguna duda de que a todos nos gustó mucho el concierto, pues la ovación cerrada que se llevó el grupo al final del concierto disipó cualquier atisbo de crítica a la sala o los asistentes al evento. Cuando las canciones son buenas y el grupo está engranado (a pesar de no concurrir el baterista habitual) solo pueden salir las cosas bien.