NEUMAN. EL ARQUÍMEDES PATRIO
Albacete, 7 de octubre de 2016. Sala ClanDestino
El pasado viernes inauguramos una temporada de otoño de salas en Albacete que promete ser, cuando menos, tan interesante e intensa como la del pasado año. Para empezar nos llevamos a la boca una delicatessen, el acústico de Paco Neuman.
El músico es icono de la escena murciana, que está en un momento envidiable, pese a que, como el sabio griego, no sea oriundo de esa tierra. Uno de Siracusa –que sí, era colonia griega-, el otro de Melilla. Uno pedía un punto de apoyo y aseguraba poder mover el mundo con una palanca. El otro solo solicita que se acerque el público al escenario, pero sabemos que con una pedalera como apoyo y el mástil de su guitarra es capaz de agitar el planeta.
Sustituyó los efectos por un bombo y una pandereta y demostró que, para empezar, es capaz de que el público se desplace en una cantidad considerable –unos tres cuartos de Sala Clandestino- a verle en un formato más cercano y, también, más difícil de defender.
Arrancó con Still on Time y Badlands, canción que compuso como BSO y ya había tocado en el festival de cine de la ciudad, Abycine – del que, por cierto, ya estamos en puertas-. Jane y Bye Fear/Hi Love, pegaron un mordisco al corazón similar al que deja una historia de amor de 16 años.
En la parte central del bolo se unieron dos cosas que no siempre son sencillas de conjugar a un tiempo, mostró que su registro vocal es envidiable y eso condujo a la emoción, literalmente. Ya que incluso tuvo que pedir al respetable un pañuelo de papel para utilizarlo en más de una ocasión.
Hizo Too Pretty e If y con I Have The Will demostró que pertenece al selecto grupo de guitarristas que pueden tocar canciones prácticamente desnudas y llegar igual a sus adeptos. De ellos también es obligado destacar el respeto y el silencio que guardaron a lo largo del show. Cuestión que no siempre ha sido así en otros de este mismo tipo en la ciudad. Aunque también tendrá algo que ver la calidad del mismo, las comparaciones siguen siendo odiosas.
Utilizó Contigo como agradecimiento a los que se preocuparon por él en los duros momentos por los que atravesó el invierno pasado y con ella se redondeó todo el sentido este acústico. Era el momento de más bajón de la noche y la única manera de levantarlo era imprimir un poco más de energía. Para ello, tiró de Tell You, de banjo en Crab Kiss y cerró la primera parte con Summer Love.
Si bien el grueso de los temas elegidos pivotaron en torno a If y The Family Plot, los bises hicieron de alfa y omega de su carrera. Se guardaba Sil Fono, primera canción de su primer LP, e I Love You, primera de su último EP, para cerrar un concierto cuyo denominador común fue la emoción y, como dirían los Violadores del Verso, la calidad como cualidad.
