LOW FESTIVAL. VIERNES. LEON BENAVENTE 1 - RESTO 0
Benidorm, 29 de julio de 2016.
Fotos: JavierPhotoRosa - Liberto Peiró
Como todos los veranos visitamos el Low Festival, que tiene lugar en Benidorm, esta ciudad, que ha sido precursora de festivales, albergando desde 1959 a 2006 el “Festival Internacional de la Canción de Benidorm” para promover la ciudad y la música española, en el cual han participado artistas tan conocidos como Julio Iglesias, Dyango, Betty Missiego o El Duo Dinámico, que se han vuelto indies este año. Pero bueno, vamos a lo que nos interesa, un festival con más de 100 artistas nacionales e internacionales se posiciona entre los mejores festivales que tendrán lugar este año, y por eso, ¡No os lo podemos dejar de contar!
El pasado jueves, comenzaba el Low festival con una fiesta en la playa en la que actuaron Black Lips, Sexy Zebras y Miss Deep’in, no pudimos acudir por problemas de agenda. El jefe no nos trajo hasta el jueves, ¡Maldito sea!
El viernes se dio el pistoletazo de salida sin frescor en el recinto de conciertos, una ciudad deportiva que se esta remozando en el apartado exterior, pero que continua con todo su esplendor interior en uno de los mejores recintos del panorama nacional, que ha pesar de sus elogios debe ir poco a poco modernizando para poder manteniendo sus estatus actual. Ahora todo parece ir cambiando en el mundo festival, y el apartado estético se tiene muy en cuenta y el Low sigue igual desde hace muchos años. Ángel Stanich dio los primeros acordes en el Escenario Ron Matusalem ante un público valiente que embadurnados en crema solar se agolpaban delante del escenario. Stanich es un seguro, sobre todo con sus ya hits característicos. Su “Carbura Nena” y sobre todo esa “Metralleta Joe” que hizo entregarse a los mas adelantados en lo que sería el primer alto en una jornada que prometía y mucho. De allí al escenario principal, el Budweiser, a ver a los afortunados del premio Emerge. Que vale que todo siga igual, pero este año la cosa es inferior en algunos aspectos y ese aspecto mas mayúsculo es el demacrado césped del escenario principal.
Los Testarosa se dieron el gustazo de abrir el gran escenario lower con un concierto sólido, con potentes guitarras y una voz muy planetas. Mucho futuro para esta pequeña banda en tiempo, que si siguen así seguro que vuelven a este festival por méritos propios. De allí al pequeño Wiko a ver a los punkis, de concepto, Camión que nos deleitaron con guitarrazos, baterías extenuantes y un oso panda que hacía de todo, tanto cojer instrumentos como repartir ginebra a sus lacayos. Sobredosis de punk que nunca viene mal. Poco a poco nos acercamos a ver a La Maravillosa Orquesta Del Alcohol, que nos enseñaron lo que siempre saben hacer. Melodías folk y blues adornadas con pinceladas rock y su puesta en escena que ya quizás esta de vuelta. Concierto normal, con un sonido que fue creciendo poco a poco pero que al final dejo indiferente a muchos de los que allí nos encontramos. Quizás el concierto mas esperado fue el de Love of Lesbian, pero en el se puso de manifiesto lo que ahora es la banda barcelonesa. La gira de la tijera puso el listón muy alto y eso es difícil de superar. Además, con tantos hits que acumulan, ya es difícil hacer un setlist que guste a todos. La gente quiere marcha y ayer los Lesbian fueron mas pausados de lo habitual. Eso si, la puesta en escena, como siempre, impoluta, con las luces en su justa medida y muy acertadas y unas imágenes de ensueño, incluida la GoPro de Balmes, hacen que el conjunto sea espectacular.
Antes de que John Boy aterrizara en el Budweiser nos dirigimos a ver a unos de los mas esperados del Matusalem. Leon Benavente es pura energía en el escenario. Desde el primer acorde de “Tipo D” sin que ellos estuvieran en el escenario el público se entregó de forma ilimitada hasta el borde del infarto en una sucesión de temazos que dejaron sin aliento a mas de uno. Difícil será que se viva otro momento así en el Low, con Abraham Boba y compañía totalmente entregados en su faena en una hora que se hizo corta, muy corta. A Belle And Sebastian llegamos, con retraso, porque hay que reponer fuerzas y sentarse porque ella noche es muy larga. A pesar de llegar al final de su concierto, nos dio tiempo a comprobar la complicidad de sus integrantes y la fuerza arrolladora de sus composiciones en un concierto lógico que terminó con gran cantidad de público encima del escenario acompañando a Stuart Murdoch. Sonaron temas de su último trabajo "Girls in peacetime want to dance” y por supuesto los grandes clásicos que han hecho de esta banda a ser reconocida como una de las mejores bandas escocesas del momento. Y comenzaba la zona euskera en el Matusalem con unos jóvenes grandes, muy grandes. Belako ya es el presente de una escena independiente que necesitaba cosas como éstas para volver a resurgir. Josu, Lore, Lander y Cris nos dieron a conocer su último trabajo “Hamen” en una hora en la que no debían contar con tantos adeptos pero que consiguieron llenar el segundo escenario en importancia de éste Low. Ese post-punk se cala en los huesos y va haciendo abertura por tu cuerpo tema a tema y además acompañado de esa fuerza desgarradora de los cuatro músicos que viven por y para sus temas. Cris enamora por su voz y Lore por sus saltos y esas lineas de bajo que son embriagadoras. Por favor, que nos abran la capilla que vamos a pedirles matrimonio ya a esta banda que debiera estar en todos los Line-up de los festivales, incluido el Glastombury, en el que después te encuentras con sorpresas nacionales (de aquí) inexplicables.
Otros de los esperados eran Hot Chip, que dieron un concierto para adictos a su música y por supuesto no defraudaron a nadie, y cuando digo a nadie es absolutamente a nadie de los que nos encontrábamos en el Budweiser o llegamos ya empezado el recital. Y es que la voz de Alexis Taylor no puede pasarse por alto y hace que los británicos triunfaran ante un anfiteatro totalmente entregado. Ya casi agotados volvimos a aterrizar en el escenario de la pista de atletismo de Beniyork para ver a los renombrados WAS. Era la segunda parte del eusko-pack y como siempre comandados por Deu nos dejaron muchas joyas actuales de ese su nuevo estilo y pasadas revisadas con sus sintetizadores. Espadas láser clavadas en el escenario en su particular bosque regado con su nuevo trabajo “Gau Ama” una evolución a lo clásico instrumentas con Txalaparta incluida con todo el sabor electrónico de los sintes. Y lo que nadie debe perderse, Deu incitando al público al baile en vez de a mirarle a el. Después de beberse medio backstage es fácil hacerlo y como siempre en su salsa, siempre nos deja lo que nadie quiere contar. Este grande de la música no debe dejar de pisar los escenario. Le queremos y le amamos hasta decir basta. Y para terminar la gran primera jornada Monarchy nos enseño lo que sabe hacer. Synthpop sin concesiones con una fuerza que hace que dudes que su música pueda venir de sus solo tres integrantes. Un final muy bueno, a pesar de cometer, el sacrilegio de esa versión de Nirvana que levantaría de golpe al mismísimo Kurt Cobain de la tumba. En los años que llevamos aquí viniendo, creo que es de los mejores comienzos de festival que hemos vivido nunca. Seguro que esto no decae y hoy volvemos a vivir una jornada apoteósica. Mañana quedamos aquí en el mismo sitio y a la misma hora y te lo contamos.