ARENAL SOUND 2015

Burriana, del 28 de julio al 3 de agosto de 2015

El pasado 28 de julio daba comienzo la sexta edición del Arenal Sound y Burriana se preparaba para una semana repleta de música, calor y playa. Con un total de 260.000 asistentes, y a pesar de los incidentes ocurridos, se ha cerrado con éxito esta nueva edición.

Muy a nuestro pesar, no fue hasta el jueves (día que realmente empezaba el festival) cuando llegamos allí. Tras el comunicado que el festival realizó por Facebook acerca de posibles lluvias todos rezábamos para que no ocurriera y los conciertos transcurrieran con normalidad. La pegatina abría la tarde de conciertos, pero no pudimos llegar a tiempo. Para nuestra desgracia, y la de todos los que allí estábamos, cerca de las 8 de la tarde, ya caían las primeras gotas, pero la esperanza de que no fuera a más seguía ahí.

Delafé y las flores azules caldeaban el ambiente y trataba de acercar al público a pesar de la lluvia. Varias veces repetían su disgusto por tener que estar retirados en el escenario (demasiado detrás estaban) pero todas las medidas eran pocas para evitar la lluvia. Parecía que todo se calmaba cuando La Roux aparecía sobre el escenario, y la verdad que con un directo bastante impecable, casi parecía que estábamos escuchando el disco allí mismo.

Nos trasladamos al escenario Negrita donde los irlandeses Delorentos luchaban de nuevo contra la lluvia que amenazaba con caer otra vez.  A pesar de que había poca gente consiguieron animar el ambiente tocando sus clásicos ‘Did we ever really try?’ o ’Secret’.

Y llegaba uno de los platos fuertes de la noche. Si algo podemos destacar de este festival es la puntualidad de los conciertos. A las 00:30 de la noche sonaban las primeras melodías tan representativas de Rudimental. El público estaba ansioso, y el cielo parecía calmado. Con una energía sobrenatural aparecieron sobre el escenario haciendo enloquecer al público, sin embargo, a la tercera canción el tiempo decidió revelarse, y no fue cosa de poco. Una lluvia torrencial caía sobre nosotros y la mayor parte de la gente huía hacia las barras a resguardarse y nosotros no pudimos más que huir a la sala de prensa. La lluvia no amainaba, y comenzaba a inundarse la sala de prensa. Grandes charcos de barro y una gran cantidad de agua inundaba el recinto, pero el agua no conseguía parar ni al grupo ni al público que estaba como loco. Sin embargo, tras más de una hora de lluvia sin parar, tuvieron que cancelar el concierto y todo el recinto se quedó a oscuras. Tanto el público como nosotros esperábamos que todo parase y pudieran continuar los conciertos, pero no pudo ser así. Con el agua por las rodillas los asistentes fuimos saliendo del recinto, y no nos sorprendió ver que mucha gente estaba recogiendo sus tiendas de campaña para irse. Nos quedamos sin ver a John Newman para nuestra desgracia.

El viernes todos esperábamos que no volviera a repetirse. El camping Arenal estaba completamente inundado y los que allí se alojaban fueron trasladados a polideportivos, a pesar de que muchos decidieron volverse a sus casas ya que la lluvia había arrasado con todas sus cosas.

Parecía que las lluvias habían parado y que íbamos a poder tener un viernes tranquilo. Supersubmarina arrancaba en el escenario Desperados alrededor de las 8 de la tarde, y consiguieron atraer a gran parte de los espectadores. No pudieron faltar sus temas ‘En mis venas’ y ‘Cientocero’.

Carlos Sadness, comenzaba a transmitir su energía habitual sobre el escenario negrita cuando dijo ‘desde aquí se distingue perfectamente a los canis, están todo fuera bebiendo y la gente guay está aquí dentro’,  personalmente creo que algo de razón tenía. Compartió escenario con la bloggera Dulceida y no se marchó sin cantar ‘Que eletricidad’ y por supuesto ‘Monteperdido’.

Con una gran fuerza subían al escenario The subways pero nosotros nos fuimos a hacer un descanso. Parecía que el tiempo había dado una tregua, y sobre el escenario estaban The shoes, demasiado bien iba todo hasta que el viento decidió pasarse por allí. El grupo tuvo que dejar de tocar y todo el equipo se venía abajo. Pero no fue solo viento, iba acompañado de lluvia (otra vez). Sin embargo, en esta ocasión la lluvia solo nos retuvo 20 minutos, pero el viento fue el culpable de la cancelación del segundo día con la amenaza de volcar una de las torres con las pantallas. Desalojaban el recinto cuando nos dijeron que el escenario Negrita estaba a punto de caerse. The hives se quedaron a las puertas, y todos nosotros con unas ganas terribles de ver a los suecos volviendo loco al público con su energía.

Por fin amanecía el día con sol, y ni la lluvia ni el viento amenazaban con un tercer día cancelado. Llegamos a tiempo para ver a Dorian y su gira 10 años y un día. Si algo nos sorprendió fue darnos cuenta de que había más gente fuera del recinto que dentro. Llegaba el plato fuerte de la noche para muchos de nosotros, uno de los grupos más esperados, Luke P y los suyos aparecieron en el escenario. The kooks consiguieron arreglar el desastre ocurrido los dos días antes y animar al público con grandes temas como ‘She moves in her own way’ o ‘Naive’.

Sunset Sons comenzaban en el escenario Negrita, y estoy segura de que no fui la única en pensarlo, ¿a quién se parecen? ¿Me recuerdan a mucho a algún otro grupo? Efectivamente, la copia a Kings of Leon estaba presente, no cabe duda. Aún así, no podemos negar que tenían un sonido muy limpio y depurado.

Si una cosa estaba clara es que la gente que se encontraba fuera en algún momento tenía que entrar, y para el comienzo de The Ting Tings ya estaba algo más lleno. Supieron arrancar a la gente a bailar y animar a todos los que estábamos allí. Llegaba el turno de la electrónica, y sintiéndolo mucho, nosotros nos aguantamos allí para verlo.

Preparados para darlo todo el último día, nos llevamos un gran chasco. Con la intención de ver a Nacho Vegas, nos encontramos a Tom Odell sobre el escenario principal. Habían cambiado todos los horarios sin previo aviso debido a una incorporación inesperada. Las Dj’s Nervo, que tenían su actuación programada para el viernes, pinchaban a las 11 de la noche, y a nosotros nos fastidiaron quitándonos a Everything Everything pasándolo a las 4 de la mañana.

A pesar de todo, Tom Odell al piano transmitía gran fuerza y sentimiento aunque mucha gente no había. Nervo comenzaban en el escenario principal, y ninguno de los otros días había visto el recinto tan lleno de gente. Nosotros nos fuimos al escenario Inside a ver a Amatria, que a pesar de los poco que éramos consiguieron arrancar a bailar a todo el que estaba allí presente. Y allí nos quedamos para disfrutar una vez más de la increíble energía del Dinero que consiguieron transmitirnos una gran fuerza sobre el escenario.

Ya llegaba el turno de Mika, que nos volvió a todos locos. Únicamente paraba cuando le tocaba sentarse al piano, y nos demostró su gran dominio del español. Tras mencionar los incidentes ocurridos y animar a la gente que allí seguía  a pesar de haber perdido todo no dejó a todos sorprendido cuando dijo “hace dos días me llamaron para decirme que no iba a poder tocar porque iban a cancelar el festival, sin embargo aquí estamos’, sin duda consiguió meterse al público en el bolsillo.

El cansancio podía con nosotros, pero aún así aguantamos para ver las primeras canciones de Everything everything, que sin embargo empezó media hora más tarde lo previsto debido a que en el escenario Negrita Sandro y The River no terminaban su sesión.

A pesar del desastre de los dos primeros días el público aguantó como pudo y dieron todo lo que les quedaba los dos últimos días. Sin embargo, es un festival en el que muchos grupos de música quedan relegados a un segundo plano y la gente prefiere quedarse fuera. Es una verdadera pena que los asistentes solo valoren la música que suena a partir de las 5 de la mañana.

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